¿A qué se debe tanta prisa?

Es la pregunta que nos hacemos STC y que se hace buena parte de la plantilla.

Nos cuesta entender que, nada más volver de la Semana Santa, a sabiendas de que puede presentarse el inicio de la cuarta ola de este virus covid19, la Empresa nos haga retornar a nuestros puestos de trabajo presenciales con el beneplácito de sus sindicatos negociantes.

Parece que tienen la memoria corta y han olvidado lo que sucedió en septiembre, fecha en la que nos propusieron retornar a nuestros puestos presenciales estando a puertas de la tercera ola. En aquel momento, las circunstancias de la pandemia obligaron a replegar el plan recomenzamos y la prudencia que pedimos los trabajadores se tuvo en cuenta, dejando lo del retorno para mejor ocasión.

Nos parece que esa mejor ocasión aún no ha llegado ni lo va a hacer el próximo 5 de abril. Entendemos que dejar un margen de tiempo finalizada la Semana Santa sería más prudente para poder comprobar la evolución de los datos de contagios, cuando además hay una fecha señalada en el calendario, el 9 de mayo, que es cuando finaliza el Estado de Alarma.

¿O quizá hay otros intereses mayores?, ¿…unos que estén por encima de la salud de la plantilla?

¿Quizá nos va a sorprender la empresa con alguna noticia respaldada por sus sindicatos negociantes a los que ya les interesa empezar a hacer campaña?

Confiemos en que la sensatez y la cordura prevalezcan y que quienes toman estas decisiones lo hagan teniendo en cuenta, en primer lugar y sobre todo lo demás, a las PERSONAS.

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