26 de diciembre 2023
Nos acercamos al final del año y todo hace pensar que también se acerca el final de la negociación. La historia se repite casi tan fielmente que, tirando de hemeroteca, en STC podríamos emitir el mismo comunicado que lanzamos a finales del año 2019, cuando se negociaba el II CEV, y a nadie le parecería desfasado o descontextualizado pues el desarrollo de la función de fin de año viene siendo tan predecible como todas las anteriores. Tensión, intriga, postureo, …en fin, como decíamos entonces, una historia bien alimentada para entretener al espectador.
Cabe recordar que desde la instauración del nuevo modelo de negociación que ha traído el modelo del C.E.V (2015-2017) en donde solo negocia una parte de la RRTT han sido muchos los derechos que se han perdido por el camino y tímidos los avances conseguidos.
En la de este año, los actores principales anunciaron, una vez mantenida la segunda reunión, una serie de objetivos a alcanzar tras el “duro proceso de negociación” al que se tendrían que enfrentar. La cuestión es que todos esos objetivos no han sido bien definidos por parte de la RR.TT. presente en la negociación, con lo que cualquier mínimo logro servirá para justificar el éxito de la tan dura negociación.
Partiendo de una postura alejada entre ambas partes y un posicionamiento definido por parte de la Empresa, el proceso negociador se va desarrollando sin sobresaltos.
Sin embargo, nos preocupa que, a estas alturas, nuevamente haya un redactado ambiguo sobre revisión salarial que no garantice la no pérdida de poder adquisitivo. Esta preocupación es consecuencia de lo que sucedió en el pasado, de las malas experiencias y de que no se contemple una cláusula que contemple atrasos referenciando al IPC REAL + 2%.
En cuanto al teletrabajo, el propósito era mejorar la situación actual, pero la mejora resulta ridícula. Lejos queda la pretensión de aumentar los días de teletrabajo semanales, quedando reducida la ampliación a una bolsa de días anuales insignificante. Máxime cuando deberíamos dar ejemplo de ello ya que es uno de los productos que ofrecemos a nuestros clientes.
Sobre la deslocalización de la actividad y la propuesta de STC para que la concesión de traslados se pueda producir durante todo el año y de manera automática, insistimos en que los traslados deberían CONCEDERSE TODOS de manera general y no bloquear la movilidad provincial voluntaria de las personas trabajadoras. La pandemia demostró que no es necesario para la Empresa retener a trabajadores en una provincia donde no desean estar.
Reducir la jornada laboral en media hora semanal para el 2024 también nos parece del todo insuficiente.
Sobre la propuesta planteada por STC de rescatar actividades externalizadas, nada se habla.
Desde STC hemos avisado repetidamente que limitar la negociación con la Empresa y no contar con todos los sindicatos nos traerá problemas, ya que la RR.TT. es más débil.
Si con una empresa con la solvencia y la solidez económica como la de telefónica se negocia a la baja con apenas avances significativos más allá de concesiones estéticas, ¿qué ocurriría si la empresa estuviera en horas bajas y/o con pérdidas económicas?
Para finalizar deseamos recordar que, lo que suceda en Telefónica será el fruto de los acuerdos entre LA EMPRESA y los SINDICATOS MAYORITARIOS y que los resultados de los acuerdos tienen responsabilidades compartidas. Repetimos lo dicho en anteriores ocasiones: Quién firma un mal acuerdo, se hace promotor de las consecuencias.